El Día Internacional de la Internet Segura, Banco Santander Uruguay intervino las marquesinas de sus sucursales para demostrar de una manera simple y poderosa la importancia de las contraseñas seguras. La acción, llamada Obvious Passwords, consistió en cambiar las letras del nombre del Banco por asteriscos, demostrando qué tan obvias pueden llegar a ser las contraseñas que utilizamos cotidianamente en plataformas digitales. La idea nace de un dato muy impactante revelado por un estudio de Deloitte que indica que el 91% de las contraseñas en el mundo tienen un alto grado de vulnerabilidad.
Obvious Password
Tu contraseña puede ser mucho más obvia de lo que piensas
Cliente
- Santander
Oficina
- Montevideo
VML Uruguay y Banco Santander nos ponen a pensar sobre qué tan obvias son nuestras contraseñas
Rafael Barthaburu
Chief Creative Officer - VML Uruguay
Los datos disponibles son contundentes en cuanto al crecimiento de las ciberestafas a nivel global. Según un estudio de Deloitte, el 91% de las contraseñas son vulnerables Otro estudio señala que en 2023 las ciberestafas se ubicaron como la tercera economía del mundo, detrás de Estados Unidos y China. Por su parte, el Phishing en Latinoamérica se ha sextuplicado durante el último año.
Uruguay es un pequeño país de tan solo 3 millones de habitantes. Eso provoca el sentir de que aquí nos conocemos todos y que nada malo nos va a pasar. Tal vez por eso somos demasiado confiados; incluso para elegir nuestras contraseñas, donde es común incluir el nombre de un hijo, fechas especiales fáciles de recordar, el nombre de la calle en la que vivimos, el nombre de una mascota o del equipo del que somos fans, o incluso secuencias numéricas muy comunes. Todos esto hace que sean extremadamente obvias y fáciles de hackear.
Intervenimos las marquesinas de las principales sucursales del país, “ocultando” el nombre del Banco para convertirlo en una contraseña muy obvia. Es decir, durante un día entero, Santander pasó a llamarse *********. Esto no pasó desapercibido ni para los clientes, ni para los peatones, ni para las redes sociales, ni para los medios de comunicación. Aunque no podía verse el nombre del Banco, todos vieron su mensaje sobre ciberseguridad.
¡Fuimos testigos de un asombroso aumento del 72% en el tráfico el día de nuestra acción! Pero eso es sólo el comienzo. En los dos meses posteriores a la campaña, las estafas cibernéticas se desplomaron a un asombroso 90% por debajo del promedio mensual.